martes, 29 de octubre de 2013

Cadáveres Que Respiran.

Día de las bestias,día de fantasmas,día de tragedia,fama y drama.En resumen,Halloween,donde las historias se ponen en su auge,donde las brujas salen a las calles;un día en el que puedes disfrazarte de ti mismo,la criatura más terrorífica entre las bestias...
Una noche de disfraces,verdades y mentiras,indistinguibles los verdaderos monstruos de los trajes... Una noche de almas perdidas.
Vagan dos muertos entre muertos que disfrazan la muerte,vagan dos esqueletos,fríos pero ardientes.Sin corazón y sin vena,sin alegría ni pena,solo la pálida inexpresión que queda en sus calaveras.Dos muertos en vida,dos vidas muertas,dos esqueletos que respiran,Jack y Sally en su vida no vivida.
Dos almas que se buscan,dos almas que se encuentran,dos almas que se pierde,dos almas que desesperan.La joven muñeca busca a un costurero que reúna sus partes,pues bien le falta  un hueco.Un hueco profundo y estrecho,difícil de entrar,pero una vez dentro,jamás podrás escapar.Sumido en el olvido,sumido en el dolor,sigue el hilo rojo que cose su corazón.
El joven de pálida expresión,tan consumido por la vida que ni le queda carne viva,solo hueso,blanco y tieso yeso,fragilidad de aspecto irrompible,cosas irrompibles,que ya se han roto.El joven busca,con su mirada vacía y cansada,busca la esperanza,que se perdió entre la multitud.Busca su carne,busca su vida,busca ver que el mundo aún gira,su duda,si es con o sin él.
Ambos se pierden,se encuentran en pensamientos,se pierden en versos,y se aman sin saber.Ambos se evitan,se buscan sin saber que su búsqueda les buscaba,prefieren no hacer una mala jugada.
Es el momento de auge,la multitud se pierde,pero entre todo lo perdido,siempre hay algo que se encuentra.Latidos frenéticos,nervios consumidos,no saben lo que han visto,pero lo ven.Se paran,se paran ellos y el tiempo,se detienen sus corazones,se detienen todo lo existente para encontrar razones.La muñeca observa a un joven desgarbado que parado se a quedado,observando su perfil.La mira,le mira,se miran,se pierden.Él la encuentra,siente su sangre fluir,siente el calor de sus venas,como se eriza su piel,como la mirada de ella se pierde en la de él.
Se descontrolan,no saben que ocurre,las manos tiemblan y el cuerpo se cubre,del calor de las miradas,del calor del corazón,como si ambos latieran a la vera y a la par,como si sus miradas encajaran como la playa y el mar.Se dilatan sus pupilas,y él,mira dentro,se hunde en un oscuro túnel de sentimiento.La ve,sabe que es ella,quien pondrá el traje de piel a sus huesos de madera.Se pierde,se cae en el pozo de su mirada,siente como su alma se enlaza.
Ella también se pierde en el irremediable laberinto,se pierde,se escapa y se vuelve a perder,ese sentimiento de conocer inunda su ser.Le conoce y solo le ha visto,le ha visto y le conocía.
Se acercan,con pasitos temerosos,como caminando en una línea de ciegos y sordos.No oyen a la multitud,solo se oyen palpitar;no ven a toda la gente,en el universo no existe nadie más.
Son puzzles,dos piezas más,pequeñas,insignificantes,pero para ellos,las más importantes.Son dos piezas totalmente distintas,no coincidían al andar,sus gustos daba igual,pero al darse la mano,era como si su mano fuera hecha para encajar en la de ella,como el puzzle inacabado tanto tiempo esperado a terminar,como unos huesos con otros,el corazón y las venas,el complemento que faltaba para que su vida fuese plena.
Sus dedos se enlazaron,sus almas se hicieron uno,sus miradas estaban llenas de algo que ni si quiera comprendían,pero,¿quién necesita comprensión cuando se trata de sentir? que bailen alocados sin disfraces hasta el fin.
Y los dos muertos,se convirtieron en los únicos vivos,perdiéndose entre la multitud de cadáveres que respiraban.












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